Galletas Suecas.

Aún recuerdo la primera vez que hice estas galletas, fue justo cuando mi sobrino empezó a hablar clarito, a expresar sus ideas y andar como un torbellino de un lado a otro.  Su sonrisa enorme y tan linda, sus ojazos abriéndose por la alegría y sus manitas llenas de harina, que no atinaba a limpiarse en su mandilito rojo.   Se subía a una silla para alcanzar la mesa de amasar y hacer las galletas junto a mi, mezclar, probar, y su carita de satisfacción cuando salían ya hechas, su impaciencia por probarlas y el orgullo de saber que él las había preparado, casi tanto como mi cariño al verlo tan feliz.    De eso hace unos catorce años (no se asusten que mi sobrino nació cuando era adolescente) y lo recuerdo como si hubiese sido ayer. 

Ahora tiene casi la misma edad que yo cuando preparábamos estas galletas cada fin de semana en casa de mis padres, el tiempo ha corrido, las ausencias se han hecho profundas,  pero el cariño que nos tenemos a pesar de cualquier cosa, seguirá vivo, incluso en esta receta que comparto con ustedes y que espero...haga nacer recuerdos tan bonitos como los míos.

Ingredientes :

• 400 grs. de harina+ la necesaria para amasar.
• 180 grs.de mantequilla derretida o muy blandita.
• 200 ml. de leche condensada (si las quieren más dulces toda la lata)
• 2 yemas de huevo
• Arándanos deshidratados para decorar.
• Cortadores al gusto.

Preparación:

1. En un recipiente, vamos a mezclar todos los ingredientes (menos los arándanos) hasta tener una masa tersa y suave.
2. Formamos una bola con la masa y refrigeramos por 30 minutos o 15 minutos en el congelador.

1. Una vez pasado el tiempo de reposo de la masa, sacamos del refrigerador y dividimos la masa en cuatro, reservando el resto tapada.  
2. Extendemos con un rodillo, en un círculo del grueso deseado y cortamos con la figura deseada. Hasta terminar con toda la masa.
3. Pasamos a una charola antihaderente o ligeramente engrasada, barnizamos con huevo batido y colocamos al centro un arándano.
4. Horneamos a 175°C de 15-20 minutos hasta que estén doraditas en la base y con un bonito tono  en la superficie.
5. Dejamos enfriar en una rejilla y listo.  Salen alrededor de 60 u 80 galletas dependiendo del tamaño del  cortador y del grosor de la masa.

Son unas galletas muy ricas y suavecitas debido a la leche condensada,  son ideales para un antojo pequeño a media tarde o una merienda ligera.

Que tengan un bonito  -casi- fin de semana!!