Delicadas las hojas van cayendo sobre la piel, se desnudan de prejuicios, andan solitarias tras el viento de todos los deseos, navegan profundamente entre las calles, se apoderan de todos los sentidos y se entregan como amantes recelosas de un color profundo y sereno, suaves caricias que se mezclan entre sabores y aromas, que miman celosamente al dueño de sus anhelos...el otoño.
Sonando bajito...I´ll take care of you.
Masa bisquets de queso.
Ingredientes:
- 250gr de harina.
- 1 cucharada de polvo de hornear.
- Una pizca de sal.
- 50gr de mantequilla.
- 70gr de queso ricotta, crema o fresco.
- 150ml de leche entera.
Ingredientes alternativos en las mismas
proporciones, salvo la "grasa":
- Harina integral o sin glutén.
- Bicarbonato.
- 30 ml. de aceite vegetal.
- Queso vegetal o yogur. (algunos quesos vegetales aquí)
- Leche vegetal o yogur.
Preparación:
- Vamos a cernir la harina y el polvo de hornear en un tazón junto con la sal.
- Mezclamos la mantequilla con los dedos y agregamos el queso, hasta que la mezcla parezca arena gruesa.
- Vaciamos la leche poco a poco y mezclamos bien hasta formar una masa suave.
- Sobre una superficie enharinada, amasamos un poco (si esta muy suave, es el momento en que podemos incorporar más harina -no demasiada- hasta que este menos pegajosa) formamos una bola y dejamos reposar quince minutos en un lugar fresco.
- Reservar la masa cubierta y en frío hasta el momento de usar.
Manzanas y duraznos al balsámico.
Ingredientes:
- 2 manzanas (las de su preferencia), yo he usado, manzana amarilla y pinta.
- 1 durazno grande.
- 50. grs. de miel.
- Vainilla al gusto.
- Vinagre balsámico al gusto.
Preparación:
- En el molde en el que vayamos a hornear los bisquets, en mi caso, una cacerola de hierro fundido.
- Colocamos una cama de lascas de manzana y duraznos, previamente cortados.
- Incorporamos la miel, vainilla y el vinagre balsámico al gusto, yo uso bastante, porque amo su sabor en las frutas y ese toque irresistible y profundo que les otorga. Las dejamos macerar a temperatura ambiente por 10 minutos.
- Reservamos.
Armado.
Una vez que tenemos las frutas maceradas y la masa lista, podemos hacer dos cosas:
- Extender la masa a un grosor de 2-4 centímetros y cortamos círculos de 5 cms. aproximadamente. O bien dividir la masa en cuatro-cinco porciones iguales (a ojo) y darles forma de tortitas (esta vez lo hice así porque me apetecía). Y cubrir con cada circulo perfecto o imperfectos como los míos, la fruta sobre el molde o cacerola para hornear.
- Cubrimos la masa y la dejamos reposar por otros diez minutos en frío o incluso en el congelador (ahí solo cinco minutos, para acelerar el procedimiento).
- Hornear 190-200ºC, hasta que la masa suba y se torne, ligeramente dorados, este proceso en mi horno (de convencción), tarda aproximadamente de 10-15, pero recuerden, cada horno tiene sus tiempos, estar atentos al color, los bisquets por lo general doblan su volumen, una vez listos.
Retirar del horno y servir bien calientitos, con un copo de yogur griego (si lo sirven como desayuno), o si lo sirven como postre, una buena bola de helado de vainilla o yogurt natural, será fabuloso, también.
Adoro las mañanas oscuras, llenas de un otoño que todo lo cubre con sus colores ámbar y el frío calando los huesos. Nada mejor para esos momentos en silencio, de buena compañía de sentarse a disfrutar de una buena bebida caliente, mientras esperamos que del horno salgan caprichos llenos de sabor, como estos bisquets de queso, que son mis favoritos desde hace mucho tiempo y que están presentes en Rústica casi desde el inicio.
Para elevar el sabor, la mejor compañía es la fruta, en esta ocasión manzanas y duraznos frescos y carnosos, que se funden en el sabor irresistible del balsámico, contra el dulzor delicado de la miel, que junto a un copo de yogur griego hacen la delicia de quien los prueba. Espero que los disfruten.
Que tengan una semana muy productiva, pero sobre todo llena de la mejor vibra posible!!!
Realmente es otoñal esta receta... te hace sentir el dulzor y el acido del vinagre, el olor del bisquets salidos el horno, con ese aroma de tostado y de queso... y todo eso con un buen café con leche (me gusta la opción desayuno)... me parecería sublime levantarme y desayunarme con estos bisquets adorables.
ResponderEliminarHoy sigue el mal tiempo que se inició el Domingo y que a mi, me mojó todita.. así que este desayuno le iría perfecto al día. Yo también adoro esta calma, que antecede al silencio del invierno. Terminamos de archivar la algarabía del verano y nos dejamos reposar bajo las mantitas disfrutando del calor del hogar.
Fantástica receta, con fotos bien sugerentes.
El otoño,mi estación favorita,me encanta.
ResponderEliminarY qué ganas de probar esos bisquets,se ven deliciosos mi niña!!!
Un beso grandote y feliz semana
Madre de dios de que hablo de la receta o de las fotos,la receta esta de diez pero las fotos hablan por si solas.....Besss
ResponderEliminarMe repito , lo se, pero es que no lo puedo evitar porque venir a visitarte es un paseo estupendo , un regalo para la vista y logicamente también para el paladar.
ResponderEliminarBesinos preciosa y feliz semana.
Pero q delicia!
ResponderEliminarCuando he llegado a la ultima foto he estado a punto de meter la cuchara por la pantalla!!
Un besote
Muy interesante esta receta, adoro los postres calientes con fruta y el acabado con esa masa me a parecido de lo más rico y apetecible. Un desayuno de otoño, tranquilo con mi taza de té, encantador! Besote
ResponderEliminarCreo que voy a cruzar el charco y me voy a instalar en tu casa...
ResponderEliminarEn serio.
Besos!
Como siempre, la receta es una delicia, pero si tuviera que elegir entre ésta o la fotografía tendría un serio problema por qué decidirme. La sesión fotográfica es espectacular y un deleite para los que disfrutamos de este arte.
ResponderEliminarUn besín.
Anda, qué receta más curiosa y apetitosa. Me gusta el procedimiento. Crees que con higos quedará rico???? Me llevo tu receta!!!!
ResponderEliminarBesitosssss
¡Qué maravilla Mayte!, me iba a la cama y tus fotos me han dado una paz increíble. Y esos melocotones con esos pastelitos encima...y ay...que hambre....
ResponderEliminarBesos reina.....a otras les llamo pichonas pero tú...no puedo dejarte con otro título....
Marialuisa
aunque no podía dejar de mirar esa preciosa foto del principio, he conseguido llegar a leer la receta y, menos mal que lo he hecho, porque es sencilla y espectacular. Aquí no encuentro ya melocotones o duraznos decentes, pero la guadaré hasta el próximo verano (espero que no se me olvide). Bs
ResponderEliminarYo me voy con Monica y me quedo tambien en tu casa¡¡ Sublime desde la A hasta la Z.
ResponderEliminarBss
Me he quedado anodada hoy con tu post. Desde el principio al final. Las fotos, la propuesta. Y esas baldosas al fondo. A mi también me gusta esta época, la oscuridad acojedora en la casa, el horno encendido y el ritmo más bajo de todo. Como si quisieramos acompañar al tiempo. Un beso
ResponderEliminarPero qué cosa más rica!! Y las fotos son alucinantes, eres una artista!! Besos
ResponderEliminarQue delicia Mayte, que preciosidad, que ambiente tan otoñal, tan bello, tan intimista. Es un postre que sabe a tradición, a tierra, exquisito, sencillo pero elaborado, elaborado con amor. Algo me dice que tuvismte la tentanción de añadirle algo de maiz, se me antoja, no se. Me ha encantado esta entrada, precioso como siempre. Un besazo.
ResponderEliminarQue preciosas fotos Mayte!! Y una deliciosa receta!
ResponderEliminarQuerida Mayte, consigues ser tan delicada en tus recetas que a tod@s nos llevas a otro mundo, a otra vida...siempre te digo lo mismo !!! irradias tranquilidad!!! eres maravillosa, como tus recetas, tus presentaciones, tus aperos y tus fotos, qué maravilla, gracias contigo no echo de menos el verano, bienvenido otoño!!!!
ResponderEliminarPreciosa fotos, elevas al grado máximo la receta con ellas..amo la mezcla de sabores que empleaste, con algo tan bueno estoy segura de que me levantaría mil veces más feliz cada mañana :)
ResponderEliminarFeliz casi fin de semana Mayte!!!
que fotos tan evocadoras, son preciosas!!! y que delicia, claro! un besazo wapa
ResponderEliminarEsta ultima fotografía me ha dejado impactada, es irresistible, me ha encantado la receta. Feliz domingo Mayte.
ResponderEliminarQué antojo Mayte por Dios, me dejas con la miel en los labios. Me encantaría sentarme en esa preciosa silla y ver atentamente cómo trabajas esa fruta y esa delicia de masa. En silencio, sólo mirar y disfrutar...No molestaría, ni notarías mi presencia...Je, je...
ResponderEliminarsi esque no puedo pasarme por aqui! me enamoran tus recetas y tus fotos!
ResponderEliminarque pinta mas rica tiene.
Un besín.
Hola Mayte, yo no disfruto del otoño como tú. Alargaría el verano hasta el verano siguiente ;)
ResponderEliminarLo que no dejo pasar es esta delicia tan otoñal que nos traes.
Las fotos son espectaculares, casi puedo oler desde aquí este platazo que nos traes.
Un beso enorme, y la mejor vibra!